Pita Navarro es la cofundadora y Directora Científica en Evvy. Pita es bióloga molecular de formación, con una profunda pasión por traducir descubrimientos científicos en tecnologías que puedan mejorar resultados y empoderar a las mujeres para que vivan vidas más saludables. Como científica emprendedora, su experiencia en startups de biotecnología incluye investigación, desarrollo y comercialización de diagnósticos innovadores y herramientas de salud digital.

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El microbioma vaginal es un ecosistema de microorganismos, incluyendo bacterias y hongos, que viven dentro de la vagina (también conocido como flora vaginal). Aunque tal vez nunca hayas escuchado del microbioma vaginal, el microbioma vaginal influye y tiene un impacto significativo en tu salud reproductiva y salud general. Las molestias vaginales son una de las principales razones por las que las mujeres buscan consejo médico, y más del 90% de estos casos son resultados del desequilibrio en el microbioma vaginal. Los desequilibrios en el microbioma vaginal pueden manifestarse como vaginosis bacteriana, vaginitis por Candida, tricomoniasis e infecciones urinarias. 

El microbioma vaginal afecta diversos aspectos de la salud femenina. Un desequilibrio del microbioma también puede ser asociado con infertilidad, complicaciones durante el embarazo, infecciones de transmisión sexual (ITS) e incluso, posiblemente, cáncer.

La investigación sobre el microbioma es un campo fascinante que está evolucionando rápidamente. Aunque muchos científicos han estudiado los microbiomas de diferentes partes de nuestros cuerpos (como el intestino y la piel) durante décadas, el microbioma vaginal no ha recibido la atención que merece — en gran parte debido a la brecha de género en la salud. ¡Pero por eso existe Evvy!

¿Qué significa para Latinas?

Las latinas particularmente, en los EE.UU. enfrentan alto riesgo de infecciones vaginales y barreras educativas sobre la salud vaginal. En Evvy, nos importa que la educación sobre la salud vaginal sea accesible y por eso hemos creado contenido que habla realmente a latinas, y en español.

 Lee más sobre los riesgos específicos de Latinas aquí.

‍¿Cómo funciona el microbioma vaginal? 

Una vagina saludable necesita tener bacterias, pero prefiere un tipo específico llamado lactobacilos. Los lactobacilos son las más “protectoras,” crean el ambiente necesario para evitar que proliferen otras bacterias "dañinas.”

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Fig 01 -> Lactobacillus acidophilus, una bacteria protectora

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Lo hacen de varias maneras:

  • Producción de ácido láctico: Los lactobacilos generan ácido láctico para mantener un pH bajo (entre 3.8 y 4.5), lo cual ayuda a proteger contra bacterias dañinas y prevenir infecciones.
  • Competencia por espacio: Ocupan lugares en la pared vaginal, impidiendo que bacterias dañinas se adhieren y colonicen.
  • Producción de bacteriocinas: Fabrican bacteriocinas, que son antibióticos naturales del cuerpo, para detener el crecimiento de bacterias disruptivas.
  • Reducción de la inflamación: Ayudan a disminuir la inflamación en tu área genital.
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Infecciones y el microbioma vaginal

Cuando no hay suficientes bacterias protectoras como los lactobacilos en tu microbioma vaginal, microorganismos disruptivos como Gardnerella vaginalis, Escherichia coli y Mycoplasma pueden colonizar y causar una disbiosis vaginal. La disbiosis vaginal es un término general que se utiliza para describir un desequilibrio en el microbioma vaginal. Esta disbiosis puede provocar infecciones como vaginosis bacteriana (VB), candidiasis vaginal, infecciones del tracto urinario (ITU) y más, lo que conduce a síntomas indeseados como picazón, ardor, irritación y flujo vaginal inusual.

El tipo más común de disbiosis vaginal es la vaginosis bacteriana (VB), definida clínicamente como un crecimiento excesivo de bacterias disruptivas en el microbioma vaginal. Esto ocurre cuando los lactobacilos disminuyen y las bacterias patógenas comienzan a dominar el microbioma.‍

Una de cada tres mujeres sufre de vaginosis bacteriana cada año, y hasta el 84% de estos casos son asintomáticos. La VB afecta de manera desproporcionada a mujeres negras e hispanas, con una investigación insuficiente al respecto (¡esa es una de las muchas cosas que en Evvy estamos aquí para cambiar!).

Pero la VB no es la única infección del microbioma vaginal. Existen otras formas de disbiosis vaginal, como la candidiasis vaginal, la vaginitis aeróbica (VA) y la vaginosis citolítica (VC), que pueden presentar síntomas frustrantes —y confusamente similares— como picazón, flujo anormal y ardor.

Si estás aquí porque sufres de infecciones vaginales recurrentes, debes saber que no estás sola.

La vaginosis bacteriana es la causa más común de síntomas vaginales entre las mujeres, y en cualquier momento, 1 de cada 3 mujeres está lidiando con esta condición. Además, 1 de cada 3 mujeres tendrá una ITU antes de los 24 años, y la mitad experimentará una en algún momento de su vida. Y eso no es todo: el 75% de las mujeres padecerán una candidiasis vaginal al menos una vez en su vida.

A pesar de que las molestias vaginales son una de las principales razones por las que las mujeres y personas con vagina buscan atención médica en los EE. UU., las tasas de diagnósticos erróneos y recurrencias son altas (¡más del 50% en ambos casos!).

Por eso, en Evvy creamos la primera y única prueba metagenómica del microbioma vaginal en el mundo, junto con atención clínica personalizada. Nuestro objetivo es brindar una atención más accesible y efectiva para todas las personas con vagina, al mismo tiempo que realizamos investigaciones para entender y tratar mejor estas condiciones.

Fig 02 -> Imagen microscópica del microbioma vaginal.

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El impacto del microbioma vaginal en la salud general.

Resulta que la composición del microbioma vaginal no solo afecta las infecciones y los síntomas vaginales. Recientemente, las investigaciones de científicos han revelado algunos aspectos únicos sobre cómo afecta nuestro bienestar general (más allá de la vagina).

Los estudios han demostrado que tener un microbioma vaginal alterado puede aumentar la inflamación e inhibir tu respuesta inmunitaria dentro del tracto reproductivo, afectando al resto de tus órganos reproductivos. Tener un microbioma vaginal alterado en comparación con uno saludable está asociado con diferentes resultados en:

Al conocer la composición de tu microbioma vaginal único, puedes descubrir cómo apoyar proactivamente su función protectora y tomar un enfoque proactivo hacia tu salud.

¿Cambia el microbioma vaginal? 

Tu microbioma vaginal puede variar según tus hábitos o comportamientos, hormonas y otros factores. Hay muchas razones por las que puede cambiar, pero algunas comunes incluyen:

  • Actividad sexual (especialmente con nuevas parejas o múltiples parejas).
  • Cambios hormonales, por ejemplo.some text
    • Estar embarazada o en posparto.
    • Pasar por la menopausia.
    • Cambiar el método anticonceptivo.
    • Sangrado menstrual en la vagina.
    • Fluctuaciones hormonales cíclicas.
  • Tomar ciertos medicamentos/suplementos (especialmente antibióticos).
  • Fumar.
  • Estrés.
  • Usar productos de higiene femenina (especialmente duchas vaginales).
Fig 03 -> Diferentes tratamientos, medicamentos y suplementos que pueden afectar el microbioma vaginal.

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No todos los microbiomas vaginales son iguales. 

Así como existen diferentes tipos de sangre, la investigación ha demostrado que la mayoría de los microbiomas vaginales caen en una de cinco categorías generales conocidas como "Tipos de Estado Comunitario" (CST en inglés).

Estas cinco categorías se determinan según cuáles microbios son más dominantes en tu microbioma, y los estudios han mostrado diferencias en síntomas, infecciones y resultados de salud entre los distintos CST. Pero la buena noticia es que, a diferencia de los tipos de sangre, puedes cambiar de un CST a otro a medida que tu microbioma evoluciona.

De los cinco CSTs, cuatro de ellos están dominados por una especie específica de lactobacilos:

  • Tipo I: Lactobacillus crispatus.
  • Tipo II: Lactobacillus gasseri.
  • Tipo III: Lactobacillus iners.
  • Tipo V: Lactobacillus jensenii.

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Fig 04 -> Evvy tiene como misión cerrar la brecha de género en la salud, comenzando por el microbioma vaginal.

Si te clasificas como Tipo IV, no tienes una especie dominante de lactobacilos. Este grupo incluye a personas que experimentan infecciones vaginales, pero también puede abarcar composiciones saludables del microbioma vaginal. Por ello, el Tipo IV se divide en cinco subgrupos adicionales.

Con la prueba de microbioma vaginal de Evvy, puedes descubrir todos los microorganismos en tu microbioma y a qué CST pertenece tu microbioma en ese momento. Aunque la investigación sobre estos tipos siempre está mejorando, la prueba del microbioma vaginal puede proporcionar información sobre tu composición microbiana individual. Nuestro equipo utiliza los datos más completos y métodos de prueba avanzados para ayudarte a entender qué significa tu tipo para tu salud y qué puedes hacer para mejorarla.

Preguntas Frequentes: ¿Qué hace una prueba del microbiome vaginal?

Una prueba de microbioma vaginal se utiliza para descubrir las bacterias y hongos presentes en tu vagina, que pueden contribuir a síntomas como picazón, olor y flujo, e infecciones como vaginosis bacteriana (VB), candidiasis vaginal, infecciones urinarias (ITU) y más.

Creamos la prueba de microbioma vaginal (que se realiza en casa) para brindarte información única sobre tu microbioma vaginal y mejor la salud vaginal; al mismo tiempo que promovemos la investigación sobre el cuerpo de la mujer, un área que durante muchos años ha recibido poca atención.

La prueba de microbioma vaginal de Evvy es la primera prueba metagenómica de microbioma vaginal certificada por CLIA/CAP  (programas regulatorios que aseguran exactitud de pruebas médicas) para ayudarte a entender y mejorar tu salud vaginal. Es una prueba sencilla que se usa en casa que revela todas las bacterias y hongos en tu microbioma vaginal.

Realizar pruebas periódicas de tu microbioma vaginal puede darte una idea de si te estás acercando o alejando de una infección o enfermedad. Tu microbioma está en constante cambio, y al detectar cualquier desequilibrio desde el principio, puedes fomentar el crecimiento de bacterias beneficiosas y evitar que las perjudiciales se establezcan.

Además, cuando modificas tu rutina —como probar un nuevo probiótico o cambiar tu método anticonceptivo—, eliminamos las dudas sobre cómo estos cambios afectan tu microbioma. Al realizar pruebas regulares con una membresía de Evvy, puedes observar cómo las variaciones en tu vida impactan la defensa natural de tu microbioma vaginal.

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